Pollença estudia desbloquear la urbanización de la Font

Elena Ballestero (UH). Un propietario de la urbanización de la Font ha llevado al Ajuntament de Pollença ante los tribunales por no haber desarrollado esta urbanización a pesar de que el Consistorio era el responsable de impulsar su dotación de servicios, desde que en los años 90 se pasara del sistema de compensación (son los vecinos quienes desarrollan el proyecto) al actual sistema de cooperación (el Ajuntament debe hacerse cargo y después repercutir el gasto entre los distintos propietarios).
La urbanización de la Font está paralizada desde la entrada en vigor del Plan Territorial de Mallorca que prohíbe la concesión de nuevas licencias en urbanizaciones que, a pesar de ocupar suelo urbano, carecen de dotación de servicios y especialmente de alcantarillado.
Nuevas licencias
Al contrario de lo que ha ocurrido con otras urbanizaciones inacabadas que han sido desclasificadas parcial o totalmente en los últimos años, como Cala Carbó o el Vilà, en la Font se podrán conceder nuevas licencias una vez disponga de los servicios mínimos.
El pleno nombró ayer un procurador para que represente al Consistorio en esta causa judicial a la vez que el alcalde, Tomeu Cifre (PP), anunció que está estudiando «la posibilidad de constituir una asociación de propietarios como paso previo para iniciar en colaboración con el Ajuntament la recepción de esta urbanización».
Cifre recordó que «aunque no existe un proyecto de urbanización aprobado, sí hay una planimetría y veremos si la dotación de servicios la hacemos nosotros o si podemos llegar a un acuerdo con los propietarios para financiarla».
Por otra parte el pleno aprobó la subsanación de algunos errores materiales en la delimitación de las zonas verdes de Formentor.

Pollença aprueba medio millón de gastos no presupuestados y anuncia que habrá más

El alcalde Tomeu Cifre critica el descontrol en el gasto en el pasado mandato y anuncia una auditoría

J. FRAU. (DdM) El primer pleno ordinario de la nueva legislatura en Pollença aprobó ayer casi medio millón de euros en facturas no presupuestadas del pasado año 2010, de las cuales unos 200.000 euros corresponden a las cuentas del Festival de Música de Pollença. En este sentido, la teniente de alcalde de Hacienda, Malena Estrany (Lliga), anunció que en los próximos plenos municipales deberán aprobarse nuevos gastos extrajudiciales porque "salen facturas de todos lados" y apuntó que en este mandato habrá un mayor control, ya que "todas las facturas deberán estar conformadas".
Los representantes de los partidos que gobernaban en la pasada legislatura recordaron que en el año 2007, el equipo de gobierno entrante "también tuvo que aprobar gastos extrajudiciales del anterior equipo". El resto de la oposición municipal criticó los desfases presupuestarios, principalmente en el Festival de Música, del cual Alternativa per Pollença reclamó una "fiscalización completa y exhaustiva".
El alcalde Tomeu Cifre (PP) señaló que "existen facturas que nadie sabe de donde han salido, incluso de obras ejecutadas en 2004, y de las que nadie quiere responsabilizarse" debido a que "el procedimiento habitual no se cumplía y se gastaba sin antes asegurarse que había crédito". A su entender, "muchas de estas facturas terminarán en el juzgado, porque los proveedores querrán cobrar". Cifra confirmó que se hará una auditoría económica.

EL DATO: POLÍTICA DE PERSONAL
La corporación elaborará un catálogo de puestos de trabajo
El pleno aprobó por unanimidad una moción conjunta de la oposición para la realización de los estudios previos para la elaboración de un catálogo de puestos de trabajo.

Medi Ambient autoriza a Costas para que regenere Cala Barques

Elena Ballestero (UH) La Comissió de Medi Ambient de les Illes Balears ha dado el visto bueno al proyecto de regeneración de la playa de Cala Barques en el municipio de Pollença, tal y como lo contempla la Demarcación de Costas de Baleares.
Ahora, el proyecto deberá obtener informe favorable del departamento de Cultura y Patrimoni del Consell de Mallorca acerca de los restos arqueológicos que existen en la zona y deberá, además, realizar un estudio de la evolución de la costa hasta la actualidad, antes de realizar cualquier aportación de arena, dado que el proyecto se basa en un informe del año 2004.
El proyecto de mejora integral de la Cala Sant Vicenç no podrá ejecutarse en su totalidad tal y como lo plantea el Ministerio de Medio Ambiente y es que la Comissió de Medi Ambient entiende que en la mayoría de aspectos «debe reconducirse hacia soluciones menos impactantes».
Así, la comisión rechaza la regeneración artificial de la playa de Cala Molins, la habilitación de un paseo hasta Cala Carbó y la construcción de un aparcamiento en este último enclave.

El Ayuntamiento incinerará los restos de palmeras afectadas por el picudo

J. FRAU (DdM) El ayuntamiento de Pollença incinerará los numerosos restos de palmeras infectadas por la plaga del picudo rojo que están ubicadas en un solar municipal de Llenaire, en el Port de Pollença, con el objetivo de evitar la reproducción de nuevos escarabajos y cortar de esta forma la extensión de una enfermedad vegetal que se ha cebado con dureza con las palmeras del municipio.
El alcalde de Pollença, Tomeu Cifre (PP), explicó ayer que la incineración de los restos de poda cuenta con la autorización de la conselleria de Agricultura, Medio Ambiente y Territorio, que ha aceptado la quema de los residuos vegetales a modo de "prueba piloto" con el fin de comprobar si la medida es efectiva o no para frenar el avance de la plaga del picudo rojo. Cifre cuenta con el permiso del Govern, aunque ayer prefirió no hablar de fechas para llevar a cabo la incineración.
Los restos de palmeras afectadas por la enfermedad se depositan desde hace tiempo en el citado solar de Llenaire, un hecho que ha provocado las quejas de numerosos vecinos de la zona, preocupados por la posibilidad de que las palmeras sanas situadas en el entorno del Port puedan contagiarse.
De hecho, fuentes vecinales han explicado estos días que la situación en el solar municipal "está peor que antes". Según denuncian estos residentes, muchas de las bolsas de plástico que contienen los trozos de palmeras infectadas "se han roto por la erosión del sol", con el peligro de que los escarabajos puedan salir. Además, aseguran que se han depositado en el solar nuevas palmeras que "no han sido tratadas" y que "se ven capullos de picudo rojo por todas partes".
Los vecinos sostienen también que la intención de enterrar los restos de poda, anunciada por exequipo de gobierno de Pollença hace meses, es una "mentira", ya que en el solar de Llenaire "sólo se ha hecho el agujero", pero las palmeras afectadas por la plaga permanecerían en la superficie.
La gestión de la plaga del picudo rojo realizada por el anterior equipo de gobierno generó numerosas críticas tanto desde la oposición política como desde diversos ámbitos sociales del municipio, con denuncias incluidas ante el Seprona y el Defensor del Pueblo.
El municipio de Pollença ha sido calificado como la "zona cero" de la plaga del picudo rojo en Mallorca, con numerosas palmeras afectadas, principalmente en la zona costera.
Además de la experiencia piloto que supondrá la incineración de todos los restos de poda de palmeras afectadas por el picudo rojo, actuación que cuenta con el beneplácito de Medio Ambiente del Govern, el ayuntamiento de Pollença ha arrancado otro compromiso al nuevo ejecutivo autonómico, consistente en la financiación del proceso de colocación masiva de trampas en las palmeras del municipio con el fin de evitar la propagación de la enfermedad.
En este caso, el ayuntamiento de Pollença será el encargado de realizar el mantenimiento de las trampas colocadas, cambiando las feromonas de forma periódica, según explicó ayer el alcalde de Pollença, Tomeu Cifre.

Turisme anuló la ayuda de 5 millones para el teatro de Moneo 12 días antes de las elecciones

Elena Ballestero (UH). El 10 de mayo de 2011, doce días antes de la celebración de las elecciones municipales y autonómicas, la Conselleria de Turisme del Govern de les Illes Balears (gobernada por el PSOE) comunicó al Ajuntament de Pollença (gobernado entonces por UM y los socialistas) la retirada de la subvención de cinco millones de euros con los que se preveía financiar la mitad del coste de construcción del teatro-auditorio proyectado por el arquitecto navarro Rafel Moneo para Pollença y que estaba valorado en 10 millones de euros.

La noticia no ha trascendido hasta ahora con UM y PSOE ya en la oposición y el PP gobernando en minoría con el apoyo de la Lliga Regionalista de Malena Estrany.
El ex alcalde Joan Cerdà (UM), no publicitó la retirada de fondos por parte de sus entonces socios de gobierno pero presentó un recurso contra la resolución del 10 de junio de 201, cuando todavía ocupaba el cargo en funciones. El Ajuntament de Pollença aún no ha recibido respuesta a este escrito por parte de Turisme.

Solución
Así las cosas, el nuevo alcalde de Pollença, Tomeu Cifre (PP), está ahora a la espera de saber si también se ha retirado la subvención de 4,5 millones de euros que el Ajuntament debía recibir de la Conselleria de Presidència, la misma que concedió el ex president Jaume Matas, siendo él teniente de alcalde en marzo del año 2006. Una vez sepa de qué cantidad exacta dispone convocará al resto de partidos políticos con representación municipal para decidir si se da carpetazo al proyecto que colea por el municipio desde hace ocho años, si se deciden a ejecutarlo tal y como lo diseñó Moneo (el proyecto del arquitecto navarro cuesta 10 millones de euros) o si bien se opta por emprender un nuevo proyecto más modesto, acorde a los tiempos de crisis actuales.
Fue el propio Moneo quien presentó en el Club Pollença, el 27 de mayo de 2006, los detalles de un ambicioso proyecto para dotar al municipio de un centro multifuncional. «El auditorio tiene que ser diseñado para ofrecer unas prestaciones exigentes y amplias. Tiene que estar disponible para acoger cualquier pequeño congreso, sesiones de cine o música», dijo Moneo, que presentó en el mismo acto la maqueta del edificio a pesar de que oficialmente nunca se le ha adjudicado el proyecto ni ha cobrado por él.

Pollença negocia con Turismo fórmulas para desbloquear la reforma del Formentor

El Ayuntamiento pretende que la concesión de la licencia deje de estar condicionada al plan de dotación de servicios de la urbanización, cuyos propietarios no se ponen de acuerdo.

J. FRAU. POLLENÇA (DdM) El nuevo equipo de gobierno del ayuntamiento de Pollença, formado por el PP y la Lliga Regionalista, quiere desbloquear cuanto antes la concesión de la licencia de reforma y ampliación del hotel Formentor al entender que se trata de un proyecto "prioritario" para "dar confianza empresarial" y mantener el municipio como "destino turístico de primer orden", según el alcalde Tomeu Cifre (PP). Por ello, los responsables municipales han entablado conversaciones con la conselleria de Turismo con el fin de "buscar alguna fórmula legal" que autorice la concesión de la licencia de obras al grupo Barceló, propietario del emblemático establecimiento turístico, de forma independiente a la dotación de servicios que está pendiente de ejecutar en la urbanización anexa al hotel, de la cual el grupo turístico que gestiona el Formentor es propietario de un cuarenta por ciento, aproximadamente.
Cifre explicó que las gestiones con Turismo se han iniciado después de constatar que el grupo Barceló "quiere seguir adelante con la reforma del establecimiento, aunque con una serie de modificaciones técnicas". A partir de aquí, la "máxima prioridad" del Ayuntamiento es "otorgar la licencia" que permitiría una ampliación del edificio en cien plazas turísticas más, llegando hasta las 350, y una reforma integral del complejo hotelero.

Plan de dotación de servicios
El obstáculo principal que mantiene bloqueado el proceso desde hace años reside en la obligación legal de esperar a otorgar la licencia de obra cuando el Ayuntamiento haya aprobado el plan especial de dotación de servicios de la urbanización de Formentor, un proyecto que debe ser consensuado con la junta de compensación integrada por los propietarios de parcelas en la zona. Y según el alcalde Cifre, el acuerdo entre los propios vecinos está lejos de plasmarse por la "poca predisposición" de los propietarios a "tirar adelante la urbanización" y porque una parte de los residentes ha recurrido contra la adaptación del Plan General de Pollença al Plan de Ordenación de la Oferta Turística (POOT), el documento que determina la necesidad de ejecutar la dotación de servicios y fija los terrenos que deberán cederse al Ayuntamiento a modo de compensación.
"No hay un acuerdo claro de los propietarios para aprobar el proyecto, por lo que el Ayuntamiento estudiará vías legales para dar licencia al hotel Formentor a expensas de la urbanización", apuntó el primer edil popular. La fórmula todavía "está en fase de estudio", pero Cifre cree que "hay vías para ello", aunque se precisará de la "colaboración del Govern" para que legisle en este sentido. La Ley 4/2008 de medidas urgentes para un desarrollo territorial sostenible "es una posible salida", según el alcalde. El Ayuntamiento confía ahora en la "buena predisposición" que ha mostrado el ejecutivo cuando se le ha planteado la problemática que afecta a uno de los hoteles con más historia de la comunidad, inaugurado en el año 1929.
El grupo Barceló presentó en el año 2008 ante el ayuntamiento de Pollença el anteproyecto de ampliación y reforma del hotel Formentor, aunque el proceso está paralizado desde entonces por la falta de aprobación del plan de dotación de servicios de la urbanización anexa al hotel. Además, tanto el ayuntamiento de Pollença como la conselleria de Medio Ambiente del Govern instaron en la pasada legislatura a la empresa hotelera a modificar parte del proyecto presentado para reducir el impacto ambiental en el entorno de alto interés paisajístico que rodea al establecimiento.

 

El interés del ayuntamiento de Pollença en el proceso de modernización del hotel Formentor tiene un componente económico importante. El anterior pacto de gobierno había calculado que el grupo Barceló debería desembolsar una cifra superior a los 600.000 euros por la obtención de la licencia de obra, cantidad que contribuiría a aliviar las maltrechas arcas municipales. Además, también se cederían unos 100.000 metros cuadrados de terrenos a la institución municipal, incluido el aparcamiento de vehículos situado junto a la playa.
De hecho, el anterior equipo de gobierno incluyó dos años consecutivos en los presupuestos municipales la previsión de ingresos por la licencia del Formentor, una medida que el actual alcalde califica de "irresponsabilidad" por el déficit generado posteriormente.
El hotel Formentor, uno de los establecimientos con más personalidad de la isla, visitado por numerosas celebridades a lo largo de sus 82 años de historia, será objeto de un contundente lavado de cara si finalmente prospera el proyecto de ampliación y reforma elaborado por el grupo Barceló. Una actuación cuyo coste superará los veinte millones de euros con la intención de convertir el complejo en un cinco estrellas de lujo, "el mejor hotel del Mediterráneo".
El proyecto básico de ejecución presentado por la empresa turística en abril de 2008 ante el ayuntamiento de Pollença y la conselleria de Turismo contempla la ampliación del hotel hasta las 350 plazas turísticas, un centenar más de las que dispone en la actualidad y el máximo que permite la normativa municipal.
El proyecto consiste en la reforma interior del edificio principal, reconocible por su estructura alargada y casi camuflada entre el frondoso pinar que lo rodea. La idea es que todas las habitaciones tengan vistas al mar y una extensión de entre 40 y 50 metros cuadrados.
Un tercio de las plazas hoteleras se situarían en diferentes bloques de apartamentos que se levantarán en los alrededores del hotel sobre antiguas construcciones auxiliares.
Sin embargo, una de las principales novedades incluidas en el proyecto, la construcción de un edificio destinado a ´spa´ y centro de convenciones, se habría eliminado de los planos originales, según explicó ayer el alcalde Tomeu Cifre. El grupo Barceló ha realizado una serie de modificaciones sobre el primer proyecto para "adaptar el hotel al mercado".

Un financiero británico adquiere sa Fortalesa por 40 millones de euros

La exclusiva propiedad del Port de Pollença llegó a alcanzar en 2008 un precio de mercado de 120 millones

H.carter / P.aguiló (UH)

Una de las más espectaculares y exclusivas propiedades inmobiliarias del Mediterráneo, sa Fortalesa del Port de Pollença, ha sido vendida por su propietario a un financiero británico.

Sa Fortalesa fue construida en 1628 para defender la península de Pollença de las incursiones berberíscas y atesora una gloriosa y coloreada historia.
Su anterior propietario, John Odgen, invirtió una pequeña fortuna en adecentar los 87.350 metros cuadrados de la finca, cuyo precio de mercado llegó a alcanzar en 2008 los 125 millones de euros.
Sin embargo, según reveló ayer a Ultima Hora un agente inmobiliario radicado en Pollença, el nuevo propietario habría pagado por sa Fortalesa entre 30 y 35 millones de libras esterlinas, unos 40 millones de euros. Sea como fuere, la compraventa de sa Fortalesa es probablemente una de las mayores operaciones inmobiliarias que se han cerrado en Balears durante los últimos años.
La superficie total del sa Fortalesa alcanza los 87.350 metros cuadrados. 1.422 corresponden a terrazas, 1.100 a jardines y 1.428 a zona residencial.
Los años de esplendor de sa Fortalesa se iniciaron cuando el artista argentino Roberto Ramauge, en 1919, compró la propiedad por 45.000 pesetas. A partir de entonces, se convirtió en el punto de encuentro de reputados pintores vanguardias como Sorolla, Anglada Camarassa, Andrés Segovia, Bernareggi, Tito Cittadini, etc. Muchos de ellos contribuyeron a dotar de singularidad la arquitectura y fisonomía del lugar. Durante la Guerra Civil sa Fortalesa fue expropiada y no fue hasta hace 30 años cuando volvió a manos privadas.

El consistorio reduce la verbena previa a l´Alborada para evitar el botellón

Se pedirá ayuda a pueblos vecinos para que impidan subir bebidas a los autobuses que vayan a la fiesta

 

PEP CÓRCOLES (DdM). ­Las fiestas de la Patrona de Pollença no se quedarán sin su revetla. Tras mucho discutir sobre la necesidad de eliminarla a causa de su coste y de sus consecuencias, pues con el tiempo ha derivado en un gran botellón, la comisión de fiestas adoptó la semana pasada una decisión salomónica.
Cabe destacar que hubo una gran asistencia de público. La sala de sesiones municipal estaba llena el pasado jueves por la noche.
El equipo de gobierno pretendía eliminar la verbena previa a l´Alborada sin hacer una consulta popular, ya no que había tiempo para ello y para elaborar el programa. Sin embargo, vecinos asistentes a la sesión pidieron que no se eliminara la fiesta. Propusieron que se pasará el concierto previsto para la noche del 31 de julio a la noche del uno de agosto, dejando para el 31 una velada de baile payés.
Así se acordó, pero también se decidió que la verbena del día uno durará sólo hasta las 2,30 horas para reducir costes de equipos y cortar la fiesta con tiempo suficiente antes de l´Alborada.
Para intentar frenar el botellón se hablará con los ayuntamientos de otros municipios, desde los que salgan autobuses hacia la verbena, pidiéndoles que controlen que no se suban bebidas.

Fuegos artificiales
Tampoco habrá fuegos artificiales; sólo una traca después de tocar el Viva Pollença en la Plaza Major. Cabe destacar que también se le deben varios montajes a la empresa de pirotecnia y ésta los ha reclamado en varias ocasiones.
La fiesta Marxa fresca se hará, con menos presupuesto, y la Marxa fresca infantil también, a pesar de que la intención del equipo de gobierno era eliminarla. Cambió de opinión tras la oferta de organizarla un grupo de voluntarios y la cesión gratuita del equipo de sonido por parte de la empresa Mai sona.
Tomeu Cifre, alcalde de Pollença, sostiene que "con estos recortes se ahorrará dinero y se podrá hacer una fiesta digna". Malena Estrany, teniente de alcalde, agrega que "restando duración a la verbena se le dará un poco de importancia a l´Alborada y no quedará engullida por el botellón de otros años".

El pacto reduce a la mitad la cifra de dedicaciones exclusivas

El alcalde accede a mantener la celebración de un pleno cada mes al no prosperar su propuesta de limitar el número de sesiones ordinarias

J. FRAU (DdM) ­La nueva corporación municipal del ayuntamiento de Pollença celebró ayer su primer pleno extraordinario, en el que se aprobaron los cargos de los regidores del equipo de gobierno formado por PP y Lliga Regionalista, la periodicidad de las sesiones y las retribuciones de los concejales.

Finalmente, el nuevo gobierno local tendrá tres dedicaciones exclusivas, tres menos que en la pasada legislatura. Una de las exclusividades será ostentada por el alcalde Tomeu Cifre (PP), que cobrará un sueldo bruto de 2.914 euros cada mes en catorce pagas, una cantidad ligeramente menor que la que ganaba su antecesor Joan Cerdà, que ascendía a 3.100 euros brutos al mes. Las otras dos dedicaciones exclusivas corresponden a la teniente de alcalde de Hacienda y Cultura, Malena Estrany (Lliga Regionalista), que percibirá 2.636 euros brutos al mes en catorce pagas, la misma cantidad que cobrará la delegada de Turismo, Medio Ambiente y Policía Local, Maria Buades (PP).
El resto de tenientes de alcalde percibirán 16.800 euros anuales en doce mensualidades, mientras que los regidores delegados del equipo de gobierno cobrarán 14.000 euros. Los ediles de la oposición ganarán 6.000 euros anuales en función de su asistencia a las sesiones municipales. Por cada convocatoria a la que no acudan, se les descontarán 150 euros.
La periodicidad de las sesiones ordinarias ha quedado fijada en una cada mes, al igual que en la pasada legislatura, al no prosperar la propuesta lanzada por el alcalde Tomeu Cifre para reducir el número de plenos a uno cada dos meses a cambio de constituir la junta de portavoces como órgano de debate político.
Por otra parte, el pleno aprobó también las retribuciones de los cuatro cargos de confianza que tendrá el equipo de gobierno. El arquitecto ganará 19.216 euros anuales; el jefe de servicio de Obras 21.536 euros; la secretaria de alcaldía, 20.303 euros; y la directora de la Radio, 26.369 euros.